Plaça de la Peixateria
Tanto si llegas por la calle de Barcelona, como si llegas por la calle de Sant Cristòfol, te sorprenderá encontrarte con La Peixateria, uno de los mejores ejemplos de arquitectura neoclásica de Mataró.
Este edificio, de marcadas líneas sobrias y clásicas, fue construido en 1841 por el arquitecto municipal Miquel Garriga i Roca. Su nombre no engaña: en este espacio, cercano al mar y al barrio de los pescadores, antiguamente estaba el mercado de pescado.
Desde el siglo quince se ha documentado una gran actividad comercial marítima en Mataró. De hecho, a pesar de no tener puerto, la ciudad llegó a competir con Barcelona. En el siglo dieciocho, y gracias al mercadeo con América, el comercio marítimo fue clave para la economía local. Incluso en aquella época, en los astilleros de Mataró se construían pequeñas embarcaciones.
La Peixateria reposa sobre la antigua muralla del siglo dieciséis y está formada por una sola nave rectangular. La fachada es totalmente simétrica y tiene dos portadas en los laterales con unas máscaras dramáticas esculpidas en lo alto. Gracias al pórtico central de seis columnas del edificio, es inconfundible. En la cornisa hay tres grupos escultóricos que simbolizan el mar y la pesca y, en medio, el escudo de Mataró acompañado por un remo y un tridente, atributo de Poseidón, dios griego de los océanos.
Actualmente el edificio de La Peixateria acoge un Centro de Cooperación y Solidaridad.